domingo, 2 de mayo de 2010




Dios te salve, María, llena eres de
gracias, el Señor es contigo. Bendita
eres entre todas las mujeres, y bendi-
to es el fruto de tu vientre, Jesús.
Enséñame, María, a creer como tú.
Intercede para que mi fe sea inque-
brantable como la tuya y como la de
tu prima Isabel.Amén

Señor, túeres mi luz, mi vida,mi
salvación. ¿ A quién iré, si no a ti?
Mírame en toda mi imperfecció n,
y ayúdame a limpiar mi casa, abrir
las ventanas y la puerta, expulsar
a los indeseables, y llénala con tu
luz, tu presencia, tu sencillez y tu
amor. Gracias, Señor. Amén